Más allá de esa colina, una calle empedrada se eleva,
como el sol y tus notas favoritas de piano.
El incidente común diario está atrapado en esta mota por siempre.
Un paraguas se limpia, el día está cubierto con la luna,
la razón de aquel día en el que nos conocimos por casualidad.
Estás viva. Déjame escuchar tu pulso y el fluir
de tu sangre.
Deseo…cielo, quiero conocerte.
Estoy eternamente caminando por estos días normales.
Deseo…cielo, quiero conocerte.
Déjame ser de la forma que soy en el paradero del tiempo.
Solo, me acerqué a la calle iluminada por la luna,
donde te recuerdo y recuerdo las notas de piano que escuché.
No necesito la voz de nadie. Me pregunto si podré volver a escuchar
aquellas notas, ahora.
Ordenando los recuerdos pasados, te veo como si fuera el primer día
en el que nos conocimos.
Estás viva. Déjame escuchar tu pulso y el fluir
de tu sangre.
Deseo…cielo, quiero conocerte.
Hace mucho frío, demasiada tranquilidad.
Deseo…cielo, quiero conocerte.
La puerta del tiempo no se abrirá, tampoco tus ojos.
¿Habrá silencio por siempre? ¿Puede mi deseo ser concedido?
No diré adiós aunque no pueda volver a verte.
Deseo…cielo, está bien si no entiendes este mundo,
está bien si ya has puesto los pies en este mundo.
Deseo…cielo. Porque si llega el momento, podré volver a verte
en cualquier momento.
Deseo…cielo, he venido para verte.
Deseo…cielo.
Deseo…cielo.
Volveré a mirar a la “flor”
“Flor”
“Flor”
hasta ese día…
Créditos: Nightgaze
Traducción al español: Aoki
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