Él hace que las flores florezcan en
árboles marchitos, él hace que la luz de la decimoquinta noche
brille con colores
y bailando como un torbellino te hace
olvidar el polvo
un pequeño niño canturreó de forma
juguetona
“¡Juguemos!”
A los pies de la puerta de un enorme
templo él sigue esperando en vano
Incluso si aplaude con sus manos, no se
puede escuchar nada
incluso si llama el nombre de alguien,
todo es tan silencioso
La diversión se encuentra en la calma
del atardecer
cuando el sonido de los insectos te
llama (a jugar)
Él hace que las flores florezcan en
árboles marchitos, él hace que la luz de la decimoquinta noche
brille con colores
y bailando como un torbellino te hace
olvidar el polvo
Y si llega el final del sueño, el
único que te enseñó a bailar por primera vez estará
fundiéndose en la luz de los cielos
del este
Alguien se burla del niño, riéndose
pero el pequeño niño siempre juega al
escondite sin conocer los rostros de las personas
“¡Juguemos!”
Uno
Dos
Tres
Cuatro
Aún no me has encontrado
Incluso si aplaude con sus manos, no se
puede escuchar nada
incluso si llama el nombre de alguien,
todo es tan silencioso
La diversión se encuentra en la calma
del atardecer
cuando el sonido de los insectos te
llama (a jugar)
Los cielos del este ya se han
convertido en cenizas
quizá simplemente estés cansado de
perseguir a la roja libélula...
“¿Por qué no lo hacemos una vez
más?”
Él hace que las flores florezcan en
árboles marchitos, él hace que la luz de la decimoquinta noche
brille con colores
y bailando como un torbellino te hace
olvidar el polvo
Y si llega el final del sueño, el
único que te enseñó a bailar por primera vez estará
diciéndote adiós con la mano en los
cielos del este, desvaneciéndose en la luz
El polvo se desvanece en el viento
un pequeño niño canturreó de forma
juguetona
“¡Juguemos!”
A los pies de la puerta de un enorme
templo él sigue esperando en vano
Créditos: Zuihitsu2016.wordpress.com
Traducción al español: Koko
No hay comentarios:
Publicar un comentario